Javier Fernández-Cid: «Queremos aplicar la doctrina social de la Iglesia al mundo de la empresa»
Javier Fernández-Cid, presidente de Acción Social Empresarial-ASE, ha desarrollado su carrera profesional en el Grupo MAPFRE, al que sigue vinculado como miembro del Consejo de Administración, y ha visitado Málaga recientemente.
Ha venido a Málaga a dar a conocer ASE, ¿podría explicarnos qué es y a qué se dedica esta asociación?
Nuestra Acción Social Empresarial-ASE fue fundada en 1951, y se trata de una asociación privada española de empresarios y directivos cristianos, sin ánimo de lucro. Fue erigida por la Conferencia Episcopal Española (CEE) y está inscrita en el Registro de Entidades Religiosas. En definitiva, somos laicos comprometidos con la labor social de la Iglesia y aplicamos a la práctica la doctrina social de la Iglesia en nuestras actividades profesionales y, de este modo, damos testimonio de ello en el desarrollo de nuestra vida empresarial.
Pero el origen de ASE bebe de raíces más antiguas, ¿no es así?
Efectivamente, somos la rama española de una asociación que se llama UNIAPAC, Unión Cristiana Internacional de Ejecutivos, que se creó en 1931, cuarenta años después de la Encíclica Rerum novarum, primera encíclica social de la Iglesia Católica, promulgada por el papa León XIII. Pues bien, pasadas cuatro décadas, el papa Pío XI promulgó la encíclica Quadragesimo anno cuyo nombre hace referencia a esos cuarenta años. Este documento motivó a una serie de empresarios a que se unieran en asociación y trabajaran sobre cómo aplicar las doctrinas que promovía la Iglesia en la economía. Por ello, la base de nuestra asociación es el pensamiento social cristiano.
Y ¿cómo llevan eso a la práctica?
Nuestra misión es, sobre todo, acompañar al directivo, apoyarlo y compartir opiniones y experiencias anteriores. Organizamos foros en parroquias, en las que realizamos actividades de formación una vez al mes. Tanto el Congreso de Laicos de 2020 como el Sínodo de la Sinodalidad convocado por el papa Francisco nos animan a salir hacia fuera y ahí debemos estar los empresarios cristianos.
¿Qué perfiles profesionales tienen los asociados a ASE?
Nuestros miembros son, antes que nada, personas, y luego empresarios y directivos, profesionales que quieren aplicar la doctrina social de la Iglesia. Pero no sólo directivos privados, también tenemos directivos públicos. El funcionario a ciertos niveles tambien tiene responsabilidad sobre personas y presupuestos. Y, en tercer lugar, contamos con los emprendedores, que cada vez ganan más prestigio social.Nuestra principal misión es comprender y conocer lo que es la doctrina social de la Iglesia para aplicarla al mundo de la empresa, y luego ver cómo se puede hacer llegar a las actividades empresariales de nuestro tiempo. Como el momento es cambiante, siempre se necesita una adaptación de esos principios a la realidad empresarial, al tiempo que queremos que se reconozca la labor del empresario, del emprendedor, tan importante en nuestra sociedad.
Beatriz Lafuente
Portal de la Iglesia Católica de Málaga