Estimados Presidentes, Directores Ejecutivos y miembros de nuestras Asociaciones UNIAPAC,
Los desafíos y la incertidumbre que enfrentamos por el brote de COVID-19 no tienen precedentes. La pandemia de Coronavirus se ha convertido en una crisis mundial y la amenaza que representa tanto para nuestras vidas como para nuestro sustento nos está dejando a la mayoría de nosotros con profundos sentimientos de miedo, inseguridad y dolor. Además, en un esfuerzo por “aplanar la curva”, muchas instituciones y organizaciones en todo el mundo han cerrado y muchos pueblos, ciudades o países enteros han implementado las cuarentenas masivas más grandes y restrictivas del mundo; un tercio de la población mundial se encuentra ahora bajo bloqueo por coronavirus.
El impacto masivo resultante en la economía mundial ha producido un shock global; en oferta (porque muchas empresas no están operando) y en demanda (porque las personas y las empresas están reduciendo las compras debido a cierres y distanciamiento social). La crisis económica subyacente está agravando la dureza y el dolor de esta situación estresante. Todas las empresas, independientemente de su tamaño, enfrentan serios desafíos con una amenaza real de disminuciones significativas en los ingresos, insolvencias y pérdida de empleos. Mantener las operaciones comerciales será particularmente difícil para las pequeñas y medianas empresas. Muchos trabajadores no pueden mudarse a sus lugares de trabajo o realizar sus trabajos, lo que tiene efectos colaterales sobre los ingresos, particularmente para los trabajadores informales y casualmente empleados, y sobre el desempleo y el subempleo, que se elevarán a niveles asombrosos.
En momentos como estos, cuando somos sacudidos de la comodidad de nuestras vidas ordinarias ante una amenaza existencial, es imperativo que confiemos ante todo en nuestra fe. Personalmente, por miedo y pérdida que puedan estar sufriendo muchos de ustedes, he encontrado un gran consuelo en las profundas reflexiones del Papa Francisco durante su bendición de Urbi et Orbi el 27 de marzo (https://www.vaticannews.va/en/pope/news/2020 -03 / urbi-et-orbi-papa-coronavirus-pray-blessing.html). Él dice que nos tomó por sorpresa una tormenta inesperada y turbulenta. Que la tormenta expone nuestra vulnerabilidad y descubre esas certezas falsas y superfluas en torno a las cuales hemos construido nuestros horarios diarios, nuestros proyectos, nuestros hábitos y prioridades. Nos muestra cómo hemos permitido volvernos aburridos y débiles las mismas cosas que nutren, sostienen y fortalecen nuestras vidas y nuestras comunidades. Con perspicacia, el Papa Francisco califica este tiempo como un tiempo para elegir lo que importa y lo que pasa, un tiempo para separar lo que es esencial de lo que no es. Es un momento para volver a encarrilar nuestras vidas con respecto a nuestro Señor y a los demás.
Les animo a todos a reflexionar a fondo sobre esta homilía en la que podemos encontrar no solo comodidad sino también pautas significativas para ayudar a los deberes de nuestros líderes comerciales a capear esta tormenta. Tomar esta crisis también como una oportunidad para demostrar a nuestras organizaciones y a todas las partes interesadas nuestro firme compromiso, como líderes empresariales cristianos, con los valores que predicamos; principalmente, el respeto a la dignidad de todos los seres humanos, y especialmente a los pobres, la libertad responsable, la subsidiariedad, la solidaridad, el bien común y el destino universal de los bienes que abarca el cuidado del medio ambiente natural y la sostenibilidad. Al adherirnos a estos principios al adoptar decisiones difíciles y críticas que nos impone esta amenaza invisible, podremos sacar a nuestras empresas de esta tormenta de manera más humana y mucho más fuerte; y vernos a nosotros mismos, como líderes empresariales cristianos, desafiados por un significado mayor y más profundo en la vida. Habríamos hecho un progreso significativo en la búsqueda de transformar los negocios en una noble vocación. Con toda humildad, y con la gran esperanza de que esto pueda ser de ayuda para otros líderes empresariales de nuestra red UNIAPAC, me gustaría compartir cómo Elecmetal S.A. se esfuerza por capear esta tormenta. Elecmetal es una corporación global, de la cual soy su CEO, con miles de empleados repartidos por todo el mundo y con fábricas en varios países de Asia, África, América del Norte y del Sur. En el documento adjunto, un memorándum interno de mi empresa, puede encontrar pautas y acciones específicas implementadas para gestionar la epidemia de COVID-19, asegurando la sostenibilidad de nuestras operaciones en todo el mundo al tiempo que aborda los numerosos desafíos y problemas derivados de esta crisis de una manera consistente con nuestros valores. También estoy abierto y agradezco, cualquier comentario o sugerencia que consideren apropiado compartir conmigo.
Si encuentran este enfoque de valor, entonces animo a cada asociación de UNIAPAC a que también obtenga ejemplos reales de cómo nuestros líderes empresariales están lidiando con esta epidemia y su consecuente crisis económica profunda. Estos ejemplos, cuando se comparten entre todos, estoy seguro, serán una fuente de inspiración para que podamos navegar de manera más segura en las aguas turbulentas de esta inesperada tormenta turbulenta. Esto es para UNIAPAC una oportunidad para mostrar solidaridad con los demás, especialmente con los más necesitados, más vulnerables, más débiles. Una oportunidad para salir juntos de esta situación.
Finalmente, les deseo buena salud y comodidad. Por favor, cuiden de sus familias, sus compañeros de trabajo y aquellos a quienes cuidan, cuidándose primero de ustedes mismos. Dios los bendiga a todos. Saludos cordiales,
Rolando Medeiros
Presidente UNIAPAC International
PD: Adjunto un artículo titulado “Desafíos y oportunidades comerciales frente a COVID 19”, escrito por Carlos E. Barrio, un amigo argentino (y versiones traducidas del español al inglés y francés) que encontré valioso y ayudó a enfrentar esta amenaza invisible.
Puedes acceder a:
Managing Coronavirus Pandemic in ME ELECMETAL
DESAFÍOS EMPRESARIALES FRENTE AL CORONAVIRUS
